Para dormir en un avión y descansar en un vuelo largo

1 Considera la zona horaria de tu destino Antes de prepararte para dormir en un avión, considera el destino que vas a visitar. En especial si se trata de zonas horarias muy desfasadas, como por ejemplo Japón o Australia. Si aún no has ajustado tu horario días antes del vuelo (que es lo más recomendable), trata de hacerlo durante el viaje. Cambia la hora en tu reloj a la de tu destino antes de abordar, y ajusta tus actividades de acuerdo con el nuevo horario. Si vas a llegar en la noche, intenta resistir la tentación de comer algo, y espera hasta el desayuno del lugar de destino. Evita consumir alimentos con muchas calorías o pesados durante el vuelo, pues complican tanto el sueño como la digestión. 2 Elige el asiento adecuado De los tips, este es el más importante para poder dormir en un avión. El más recomendado es el de la ventana, ya que ofrece un punto de apoyo más cómodo que los otros dos. La única manera en que debes evitarlo, es solo si visitas continuamente el baño, y tienes que estar pidiendo a tus compañeros de asiento que te dejen pasar. Te recomendamos elegirlo al momento de reservar, aunque implique un gasto adicional. De igual manera, toma en cuenta que si eliges un asiento en salida de emergencia por el espacio, estos no se pueden reclinar para atrás. 3 Prepara tu kit de sueño Crear tu propio kit de amenidades para dormir en un avión, el cual puede hacer la diferencia. Debe llevar tapones para los oídos o audífonos con cancelación de ruido, y una máscara para dormir, pues son elementos básicos para limitar la estimulación que interrumpe el sueño. Un poco de lavanda esencial en las sienes puede ayudar a inducir la relajación. La melatonina también puede ayudarte a dormir en vuelos nocturnos, pero consulta a tu médico antes de tomar cualquier suplemento. 4 No olvides tu almohada de cuello Entendemos que las almohadas de cuello pueden no ser lo más elegante del mundo para dormir en un avión, pero las adecuadas hacen una gran diferencia en términos de calidad del sueño, pues es una manera segura de que tu cuello y espalda no te molesten al llegar. En la actualidad hay muchos modelos nuevos y discretos, diseñados para empacar en tu equipaje de mano cuando no estén en uso. O también puedes optar por una almohada especial de viaje, son de gran ayuda, sobre todo si vas a volar en el asiento de en medio o lateral, pues te permitirá recostarte en la mesita plegable de la manera más cómoda.