Limpiar y tonificar
• Remueve
las impurezas que puedan a alterar la textura de la piel.
• Balancea
el PH
• Previene
la sequedad.
• Humectar
1.-Hidratar antes de aplicar la base de maquillaje
Una piel bien humectada logrará que las líneas de expresión
no se acentúen. Entre lo que puedes utilizar para hidratar se encuentran:
• Esencias.
• Sueros
faciales con propiedades acuosas.
• Crema con
ceramidas y activos que protejan la barrera cutánea.
2.-Combinar el maquillaje con un hidratante
Mezcla unas gotitas
de suero o crema hidratante a la base, especialmente si esta posee efecto mate,
aterciopelado o de larga duración.
Aplícala con pequeños golpecitos, así el producto se fijará
sin marcarse.
3.-Aplicar la base sin excederse
Aplicar base y corrector con brocha o pincel en muy pequeñas
cantidades y en áreas estratégicasc, luego difuminar con esponjas de manera que
no se acumule maquillaje.
4.-Retirar excesos
Al pasar las horas, el maquillaje empezará a asentarse en
las líneas de expresión. Para ir controlando esto, lleva una esponja pequeña
con la que puedas absorber el exceso que comience a florecer. Así volverás a
generar uniformidad en la piel.
5.-Evitar maquillaje en polvo
Al absorción de humedad causa una sensación de “piel seca” y
las líneas de expresión comenzarán a entrecortase con el pasar de las horas.
Así que no es recomendable el maquillaje en polvo. En caso de que no haya otra
alternativa, debes apostar por opciones más finas y sueltas.
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