El saber
popular nos indica que no debemos comer antes de acostarnos, pero eso no
necesariamente es cierto, los alimentos equivocados antes de acostarse nos
pueden causar problemas. Por esa razón estas son
las cinco mejores opciones para un refrigerio nocturno.
1. Plátanos:
Contienen altos niveles de magnesio y potasio, que funcionan bien juntos para
relajar los músculos y contienen mucha vitamina B6.
2. Almendras:
Son un gran tentempié para poder lograr de 6 a 8 horas de sueño porque son
ricas en grasas saludables que tardan un tiempo en digerir.
3. Miel: Resulta
que un poco de azúcar a la hora de acostarse realmente ayuda a su cerebro a
utilizar el sueño de manera más efectiva. Una cucharada de miel basta.
4. Avena: Es
un hidrato de carbono que, cuando se digiere, aumenta los niveles de insulina
en la sangre. Una pequeña taza de avena te hará descansar.
5. Fruta
kiwi: El kiwi es ácido y dulce, por lo cual es una estrella para la gestión de
los antojos. Contiene una buena cantidad de ácido fólico y potasio, así como
vitaminas C y K.
Fuente: Food
eat safe.
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