Durante la
Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos recolectó grasa de tocino, para crear
glicerina y con ésta bombas.
En una
animación de Disney, se agradeció a las amas de casa por donar más de 2 mil
millones de libras de grasa al año, suficiente para disparar 10’000 millones de
veces sus cañones.
Consumir
tocino durante el embarazo ayuda en el desarrollo cerebral del bebé (claro,
evitando el exceso)
Durante la
misión del Apolo 8 a la luna, los tres astronautas desayunaron tocino todos los
días.
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